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Todo lo que hay que saber sobre la baliza V-16
A partir del 1 de enero de 2026, la baliza V-16 conectada será el único sistema de preseñalización de peligro obligatorio en España, marcando el fin definitivo de los tradicionales triángulos de emergencia. El objetivo último de la DGT con esta medida es aumentar la seguridad vial, evitando la maniobra de instalación de los triángulos avisadores, que cada año causa la muerte a más de 25 personas.
A continuación, se resumen las principales características de este nuevo dispositivo.
Obligatoriedad. Será obligatorio a partir del 1 de enero del 2026 y solo podrán usarse las balizas conectadas a la plataforma de la DGT 3.0. Sustituye a los clásicos triángulos en caso de inmovilización de vehículo en la calzada, que ya no podrán utilizarse. Están obligados a llevarlos los turismos, vehículos mixtos y automóviles destinados al transporte de mercancías y autobuses, así como los transportes de mercancías peligrosas. Las motos no están obligadas a su uso.
Validez dentro y fuera de España. El uso de la baliza será obligatorio en todo el territorio nacional, con independencia del organismo competente (DGT, Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco y Servei Catalá).
Uso fuera de España. La baliza puede ser usada fuera de España, pues según la Convención sobre la Circulación Vial de Viena de 1968, los vehículos en circulación internacional deben cumplir las disposiciones del país en el que estén matriculados.
Uso por vehículos extranjeros que circulan por España. De acuerdo con la misma Convención sobre la Circulación Vial de Viena de 1968, los vehículos están obligados a cumplir la normativa del país en el que están matriculados, por lo que no les será exigible el uso de la baliza V-16 a su paso por España.
Uso. El dispositivo debe guardarse en la guantera, estar accesible y cargado. Deberá colocarse en la parte más alta posible del vehículo inmovilizado, buscando su máxima visibilidad. Si el vehículo tiene una carrocería de aluminio o un techo de cristal, es aconsejable comprar un dispositivo que venga dotado de soporte con ventosa u otro tipo de sujeción
Funcionamiento. La baliza empezará a funcionar automáticamente desde el mismo momento en que se active, sin necesidad de hacer nada más. No necesita instalar aplicaciones, ni realizar llamadas de teléfono, pues incluye en su interior un chip GPS y una tarjeta SIM no extraíble que se encargan de realizar la conexión. No transmite datos personales, ni del vehículo, solo y exclusivamente envía la localización, que permitirá avisar a otros conductores, que podrán recibir la información por apps de circulación o por los paneles variables de la DGT.
Pasos siguientes. Una vez colocada la baliza, los ocupantes del vehículo deberán abandonarlo cuando sea seguro hacerlo y situarse en un lugar seguro. Además, tendrán que avisar a los servicios de emergencia, a su compañía de seguros o a la grúa, ya que la baliza únicamente envía la localización del vehículo, sin ningún tipo de conexión con otras entidades, ni información sobre el posible siniestro o avería, ni sobre el vehículo, el conductor o sus propietarios.
Con el objetivo de facilitar su conocimiento y aclarar las dudas que existen al respecto, la DGT facilita más información a través de su página web: https://www.dgt.es/muevete-con-seguridad/tecnologia-e-innovacion-en-carretera/Dispositivos-de-presenalizacion-V16/
Los pactos asistenciales, un instrumento para regular la convivencia en pisos compartidos
Compartir piso entre personas sin vínculo entre ellas, ya sean compañeros de piso o cuidadores informales, se ha convertido en una realidad de amplio alcance social, un hecho ante el que los notarios han recomendado el uso de los pactos asistenciales, un instrumento jurídico que regula, aclara y protege este tipo de relaciones. La iniciativa surge ante la falta de regulación en el Código Civil y responde a la necesidad de adaptar el derecho a realidades modernas como el envejecimiento poblacional y los cambios en las estructuras familiares que han generado convivencias no tradicionales.
Los pactos asistenciales son contratos privados que establecen derechos y obligaciones claras para cada conviviente, definiendo cómo se reparten los costes, quién se encarga de determinadas tareas y qué procedimientos seguir en caso de que alguien decida abandonar la vivienda. Estos pactos funcionan como un seguro que protege a todas las partes y evita conflictos futuros y son especialmente útiles para las personas que comparten piso y gastos, bajo el modo de alquiler compartido.
En el contexto de un contrato de arrendamiento, el pacto asistencial puede detallar cómo se distribuyen la renta, los suministros (agua, luz, gas) y los gastos comunes, evitando malentendidos comunes en pisos con múltiples inquilinos, incluso las cláusulas de desvinculación anticipada o indemnizaciones, siempre notificando al propietario. Los notarios destacan que, sin estos pactos, la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) impone responsabilidad solidaria por defecto, lo que obliga a todos a cubrir la parte de quien se va, generando tensiones.
Pero el pacto asistencial no solo contempla los aspectos económicos, sino que también puede regular los derechos de los convivientes en relación con los bienes comunes o compartidos. Por ejemplo, se pueden incluir cláusulas sobre la custodia de muebles, electrodomésticos o depósitos de alquiler, de manera que quede claro quién asume la propiedad y quién es responsable de los daños. Esta claridad reduce la incertidumbre y proporciona un marco jurídico que respalda las decisiones tomadas por cada miembro del hogar.
Transportes ampliará a 34 las rutas concesionales de autobuses
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha anunciado la ampliación del nuevo mapa estatal concesional de autobuses interurbanos a 34 corredores nacionales, una decisión que surge tras el rechazo mayoritario de las comunidades autónomas —excepto Cataluña, País Vasco y Asturias— a asumir la gestión de rutas intraautonómicas que el Gobierno central consideraba de su competencia.
Inicialmente, el plan preveía solo 22 corredores optimizados para rutas de larga distancia, con menos paradas para hacer los servicios más rápidos y económicos, pero la negativa regional ha obligado a incorporar 12 corredores adicionales. De esta forma, se garantiza la continuidad de todas las paradas históricas de las líneas de autobús, evitando interrupciones en el servicio para los usuarios en poblaciones pequeñas y medianas.
El objetivo del nuevo mapa es modernizar y simplificar la red estatal de transporte por carretera, reduciendo de 75 contratos actuales a solo 34, lo que facilitará la gestión y licitación de servicios más eficientes. El Ministerio ha defendido esta ampliación como una medida para preservar décadas de conexiones territoriales, financiando directamente las rutas rechazadas por las regiones. A cambio de que las comunidades asumieran esas rutas cortas —que conectarían pueblos remotos con núcleos mayores donde pararía el transporte de largo recorrido—, el Estado ofrecía un subsidio de unos 40 millones de euros anuales, pero la mayoría optó por declinar la propuesta tras años de negociaciones.
En un paso clave hacia su implementación, el Ministerio publicó el 8 de noviembre en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) el anuncio de licitaciones para 31 de los 34 corredores, excluyendo tres ya anunciados en 2022 (Castro Urdiales-Bilbao, Madrid-Valencia y Madrid-Zaragoza-Barcelona). Los detalles de las condiciones de servicio se definirán en los contratos individuales, priorizando la accesibilidad y la sostenibilidad. Esta configuración final representa un importante avance en la reestructuración del transporte por autobús en España, buscando el equilibrio entre la eficiencia nacional y la cobertura integral de las necesidades locales.







